El monasterio, bajo la montaña
El impresionante interior
Tamy bajo los arcos.
A contraluz en la gran sala.
El cáliz, pero como en Indiana Jones y la última cruzada, hemos elegido mal, ya que solo es una reproducción.
Increiblemente, parece que los constructores del monasterio ya conocían a los surkis de Renna.
Aquí lo que más hay son piedras y cadáveres.
Cualquier día esto se hunde.
A ver si viene pronto el bus y no nos pilla debajo.